Rollitos de Mermelada: Deliciosos y Esponjosos Bocados Caseros

Introducción

Los rollitos de mermelada son un dulce que se deshace en la boca, ofreciendo una combinación perfecta entre la suavidad de la masa y el toque dulce y afrutado de la mermelada. Esta receta es ideal para disfrutar en cualquier momento del día, ya sea como desayuno, merienda o postre. Con ingredientes sencillos y una preparación fácil, ¡pronto podrás deleitarte con estos esponjosos rollitos caseros!

Ingredientes

• 250 g de harina de trigo
• 100 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
• 75 g de azúcar
• 1 huevo
• 1 cucharadita de polvo de hornear
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 1 pizca de sal
• Mermelada (la que más te guste: fresa, frambuesa, albaricoque, etc.)
• Azúcar glas (para espolvorear, opcional)

Método de preparación

1. Preparar la masa:

1. En un bol grande, mezcla la harina, el polvo de hornear, la sal y el azúcar.
2. Añade la mantequilla en trozos pequeños y, con las yemas de los dedos, integra la mantequilla con los ingredientes secos hasta obtener una mezcla arenosa.
3. Incorpora el huevo y la esencia de vainilla, y mezcla hasta formar una masa suave y homogénea. Si la masa está muy seca, agrega una cucharada de agua fría.
4. Amasa durante unos minutos hasta que la masa esté bien integrada y suave. Cubre la masa con un paño y deja reposar durante 15-20 minutos.

2. Estirar la masa:

1. Una vez que la masa haya reposado, colócala sobre una superficie enharinada. Con un rodillo, estírala hasta que tenga un grosor de unos 3-4 mm.
2. Recorta la masa en rectángulos de aproximadamente 8×12 cm.

3. Rellenar los rollitos:

1. Coloca una pequeña cantidad de mermelada en el centro de cada rectángulo de masa. No pongas demasiada para evitar que se derrame durante el horneado.
2. Enrolla cada rectángulo cuidadosamente formando un rollito.

4. Hornear los rollitos:

1. Precalienta el horno a 180°C (350°F).
2. Coloca los rollitos en una bandeja de horno previamente forrada con papel para hornear.
3. Hornea durante 12-15 minutos o hasta que estén dorados y esponjosos.
4. Una vez fuera del horno, deja enfriar durante unos minutos.

5. Servir:

1. Si lo deseas, espolvorea los rollitos con un poco de azúcar glas para darles un toque extra de dulzura.
2. ¡Listo! Ahora puedes disfrutar de estos deliciosos y esponjosos rollitos de mermelada acompañados de tu bebida favorita.

Consejos de servicio y almacenamiento

• Servicio: Los rollitos de mermelada son perfectos para acompañar un café, té o chocolate caliente, y son ideales para compartir en una merienda o como postre.
• Almacenamiento: Guarda los rollitos en un recipiente hermético a temperatura ambiente por 3-4 días. Para mantenerlos frescos y suaves, puedes envolverlos en papel film.
• Congelación: Si quieres hacer una mayor cantidad, puedes congelar los rollitos antes de hornearlos. Solo colócalos en una bandeja y congélalos. Cuando los quieras hornear, solo sácalos del congelador y hornéalos directamente, agregando un par de minutos al tiempo de cocción.

Variantes

• Rollitos de mermelada de diferentes frutas: Puedes experimentar con diferentes tipos de mermelada, como arándano, ciruela o manzana.
• Rollitos con nueces: Añade trozos de nuez o almendra en el relleno junto con la mermelada para darle un toque crocante y sabroso.
• Rollitos rellenos de chocolate: Si prefieres algo más indulgente, en lugar de mermelada, puedes usar chocolate derretido o crema de cacao.

FAQ

1. ¿Puedo usar masa comprada?
Sí, si prefieres ahorrar tiempo, puedes usar masa de hojaldre o masa para galletas comprada. Solo asegúrate de ajustarla al tamaño de los rectángulos que necesitas.

2. ¿Puedo hacer los rollitos más grandes o más pequeños?
¡Claro! Puedes ajustar el tamaño de los rollitos según tus preferencias. Si haces rollitos más grandes, aumenta el tiempo de horneado. Si los haces más pequeños, reduce el tiempo de cocción.

3. ¿Cómo puedo hacer que los rollitos sean más crujientes?
Para obtener un toque más crujiente, puedes pincelar los rollitos con huevo batido antes de hornearlos. Esto les dará un color dorado y una textura crujiente por fuera.